Como ya conté en «Tejer por tejer«, empecé esta manta como uno de esos proyectos en los que tejes para pasar el rato y gastar hilo, para relajarte y mantenerte ocupada, pero sin rumbo concreto. El resultado ha sido sorprendente: una mantita llena de color y magia que nos tiene enamorados.

El patrón que he seguido es Sunny Spread de Ellen Gormley, pero el resultado es muy diferente del original. Lo trabajé con hilo acrílico y aguja de 3 mm. Hice un cuadro de 10×10 combinando 10 colores (claros-oscuros), haciendo el círculo interior de un color y el borde de otro. Una vez hechos, los combiné mezclando todos los colores en cierto orden y escogí el blanco para unirlos (con punto bajo) y hacer un borde sencillo, no el que indica el patrón.



Ahora ya, que llegue el invierno. Pero que tarde, que tarde mucho aún. (Más fotos en Flickr)
